Jane escribe a su hermana Cassandra, y la carta está llena de actividades cotidianas: hemos cenado con fulanita, el nuevo criado trabaja muy bien, achaques de salud de la tía… etc. Pero, en el fondo, podemos percibir a una Jane satisfecha. Sabe que no se puede dar mucho bombo ante su hermana; tan sólo unos cuantos obligados elogios (la obra era MUY BUENA), y poco más. Aun así, su ánimo es ligero, sabe que poco a poco tiene que ir diciéndole a sus más allegados, y no tanto, que ella es la autora de Orgullo y Prejuicio, y de Juicio y Sentimiento y, por supuesto, ¡está encantada! aunque tenga que disimularlo. La vida le sonríe y ella sonríe a la vida. No hay problemas, los resfriados no lo son tanto, se pueden hacer bromas ligeras de las actitudes y conductas de sus allegados….
Jane parece feliz. Y me alegro. Hoy, hace doscientos años, Jane escribía lo siguiente:
Carta de Jane a Cassandra (Jane tenía 37 años)
Martes 9 de Febrero de 1813
De Chawton a Manydown
Voy a contestar rápidamente a tu carta, mi querida Cassandra. No creo que, de momento, tenga otros méritos para recomendarla pero quizás finalmente llegue a convertirse en unas largas y agradables cuartillas.
¡Menudo día tuvimos ayer! ¡Cuántos espíritus impacientes y quejumbrosos han debido permancer ocultos! No se me ocurrió otra cosa que pudiera entretenerte más que empaquetar tu ropa.
Mi madre estaba bastante inquieta sobre Edward y Anna, y no estará tranquila hasta que sepa cómo se van a organizar sus viajes. Dentro de pocas horas serás transportada hasta Manydown, y de ahí a la franqueza, comodidad, café y cribbage (juego de cartas). Es posible que se trate de tu última visita al lugar. Mientras medito sobre el asunto, te pido que saludes afectuosamente a Alethea (no te olvides de que Alethea sea la primera, pues es una señorita) y a la Sra. Heathcote, y dale amables recuerdos a la Srta. Charlotte Willliams. ¡Piensa al menos en haber tenido finalmente el honor de haber visto a esa maravilla de las maravillas que es su hermana mayor!
Lamentamos mucho lo que nos dices de Deane. Si la Sra. Heathcote no se casa con él ahora y lo reconforta, pensaré de ella que es una María y que no tiene corazón. De verdad pienso que, o bien ella o Alethea tienen que casarse con él pues, si no, ¿dónde encontrará la felicidad?
Me alegra enormemente que puedas decir lo que dices, después de haber leído toda la obra. Y los elogios de Fanny me resultan muy gratificantes. Tenía bastantes esperanzas con respecto a ella, pero no estaba segura. Me basta con que le gusten Darcy y Elizabeth. Puede odiar al resto, si quiere. Esta mañana he recibido su opinión de su puño y letra, pero tu transcripción de la misma, que es la primera que he leído, no ha sido, ni es, menos aceptable. Por supuesto, la que me envía a mi, son todo elogios. Pero la verdad más exacta, que es la que te envía a ti, me parece suficientemente buena.
Vamos a ver a los chicos esta noche durante unas horas. Voy a organizarles el tema del carruaje, que propondré para las cinco de la tarde, pues comeremos a las tres.
Lamento tener noticias de que Sackree se encontraba peor de nuevo cuando escribió Fanny. La noche anterior tuvo un ataque con tiritona violenta y fiebre, y todavía estaba tan enferma que Fanny, que estaba escribiendo desde su habitación, se asustó.
Parece que la Srta. Clewes es exactamente la gobernanta que habían estado buscando durante los últimos diez años. Ha

tardado más en llegar que el último hatillo de maíz de J. Bond. ¡Con tal de que sea capaz de mantenerse buena, amable y perfecta! Clewes (ovillo) & (sic) es mejor que Clowes (garra, ndT). ¿No es acaso un nombre para que Edward pueda hacer juegos de palabras? ¿no es acaso la garra una uña?
Si, creo que voy a revelárselo a Anna. Y si tu la ves, y no te molesta el encargo, puedes hacerlo en mi lugar. Sabes que tenía intención de decírselo de la mejor manera, aunque es posible que no regrese a tiempo.
Browning lo está haciendo muy bien. En la medida en la que ha sido capaz de hacer los trabajos del exterior, mi madre está muy satisfecha. Los perros parecen estar tan felices con él como con Thomas. Me imagino que Cook y Betsey están mucho más contentos. La pobre Cook tendrá que pasar ahora la prueba de la estación húmeda, pero todavía no ha empezado a quejarse demasiado. Creo que el viejo Philmore ya está bien de nuevo.
Mi resfriado ha estado de ida y vuelta casi desde que te marchaste, pero nunca ha sido demasiado fuerte. Lo empeoro cuando salgo, y me lo curo cuando me quedo dentro. El sábado fui a Alton, y el fuerte viento lo empeoró, pero como me he quedado en casa desde entonces, ya casi ha desaparecido.
He tenido cartas de Charles y de mi tía en estos últimos días. Mi tía se pasa casi todo el tiempo en su silla, pues se le ha reventado el sabañón de un pie, y el otro tiene una hinchazón bastante fuerte, que mi tía no sabe cómo llamar. Parece que no le duele tanto como para que se trate de un ataque de gota. Seguramente ya has tenido noticias de todo esto en Steventon. Dice que se va a quedar un par de semanas más en Scarlets. Creo que está deseando llegar a Bath, pues se temen que hayan robado en su casa de Pultney St.
Charles, su mujer y sus hijas mayor y menor llegaron sanos y salvos al Namur el pasado domingo por la noche. Han dejado a la mediana en Keppel St.
Lady Williams ha empezado de nuevo con sus achaques de salud y ha sido enviada durante un par de meses con sus amistades. Quizás sea capaz de hacerlos enfermar a ellos también.
Me ha sido solicitada información sobre el juramento tomado antaño en la ceremonia de Bell, Book y Candle (un tipo de excomunión. Ver más AQUÍ. NdeT), pero no tengo nada que aportar. Quizás tu seas capaz de averiguar algo sobre su origen y significado en Manydown. Las damas que leyeron esos enormes, grandes, estúpidos y gruesos volúmenes de tamaño de cuartilla, que siempre pueden verse allí en la sala del desayuno, deben de estar familiarizadas con todo lo que exista sobre la tierra. Detesto la cuartilla. El libro del Capt. Pasley es demasiado bueno para su sociedad. No serán capaces de comprender a un hombre capaz de condensar sus pensamientos en una octavilla. Sin embargo, no tengo intención de hacerle sentir mal a la Sra. H. sobre sus contactos sociales. Si a ella le satisfacen, pues bien. Si cree que satisface a los otros, pues mejor.
No tengo nada que decir de las quejas que me llegan de todos los rincones. Aniquila a la pobre Sra. Sclater si te apetece, mientras estés en Manydown.
La Srta. Benn estuvo cenando aquí el viernes, y no he vuelto a verla desde entonces. Nos queda todavía una tarde más de lectura para terminar el libro.
No tengo ninguna noticia de los Powtring. Los Clement están en casa y no les queda más remedio que leer. Están ahora con la Srta. Edgeworth. Para la segunda quincena, he dispuesto de la Sra. Grant para la Sra. Digweed. Para ella pasará desapercibido cuál de las 26 quincenas del año es la que le toque tener el tercer volumen.
Está lloviendo con furia y, aunque se trata solamente de una tormenta, probablemente haga enviar mi carta a Alton en vez de ir yo misma.
No tenía ni idea de que hubieras escrito a través del Sr. Gray. Supongo que el domingo o el martes te lo podré confirmar.
Cook no cree que el proceso de hidromiel esté en condiciones de ser detenido ahora.
No sé cuáles pueden ser las nociones que tenga Alethea sobre lo que es escribir una carta y escribir una nota, pero creo que todavía está en deuda conmigo.
Si la Sra. Freeman se encuentra en algún lugar sobre la tierra, dale mis mejores recuerdos.
Tuya afectuosamente.
La Srta. Auten
A Manydown
A través Sr. Gray
Nota: la traducción la ha realizado la autora del blog, no con objeto literario, sino por el contenido del estado físico y/o anímico de Jane Austen, por lo que es susceptible de mejoras en el estilo, la interpretación o la traducción de algunos términos.
Fuente: Le Faye, D. (1995), Jane Austen’s Letters, Ed. Oxford University Press