Todo va sobre ruedas entre Darcy y Lizzy, los dos están receptivos el uno al otro y, además, lo notan. Darcy está confiado y Lizzy siente que su corazón late de otra manera por él. Visto el cambio tan positivo en ambos, el escenario era perfecto para una segunda intentona. Sin embargo, la Ley de Murphy, que es implacable, se confirmó una vez más: si algo malo puede ocurrir, ocurrirá. Y ahí tenemos a Lydia que cede ante las falsas proposiciones de Wickham, desbaratando cualquier esperanza que hubiera podido albergar Lizzy de ser, en algún momento, la Señora de Pemberley…
Capítulo 46
Lizzy recibe en la posada de Lambton las dos cartas de su hermana Jane: la primera había sido enviada a otra dirección equivocada y llegó junto con la segunda. Las noticias no son buenas, pues Wickham se ha escapado con Lydia a Escocia.
Ahora vienen las justificaciones de Jane que yo, qué queréis que os diga, no entiendo. Si a alguna se le ocurre alguna explicación o entiende los argumentos de Jane, agradecería sus comentarios:
(Jane sobre Wickham) Al menos su elección ha sido carente de interés, pues él está al tanto de que mi padre no puede darle nada.
¿Por qué creéis que Wickham eligió a Lydia? ¿Para vengarse de Lizzy, que había descubierto su personalidad?¿Por puro divertimento, pues no tenía la más mínima intención de casarse finalmente con Lydia?¿Habría tenido noticias del interés de Darcy por Lizzy y de esta manera fastidiaba el plan?
Pero la explicación que da ahora Jane me deja estupefacta. O no. Quizás sea el mejor ejemplo de cuándo la bondad dejar de serlo para convertirse en estupidez en estado puro:
… Cuán agradecida me siento por no haberles hecho saber lo que se ha dicho en su contra; nosotras mismas debemos de olvidarlo…
De verdad, no entiendo dónde está ni la bondad ni el sentido común en esta actitud. Menos mal que Lizzy, como veremos más adelante, tiene la mente más clara y, si me apuráis, más justa y bondadosa que su hermana.
En la segunda carta, las noticias son desastrosas: la parejita no se ha ido a Escocia. “No sé por qué”, pero no me sorprende; es más, era lo esperable, sabiendo lo que se sabía sobre Wickham, en vez de pretenderle ver como lo que no era.
En pleno estado de shock, Lizzy salta de la silla para buscar a sus tios y se topa de narices con el Sr. Darcy, que había acudido a Lambton a visitarla, presumiblemente para hacer un segundo intento de proposición (iba muy elegante, y ya sabemos lo que eso significa). Pero Lizzy le informa de lo ocurrido, y hace un comentario probablemente crucial…
… Vd. le conoce demasiado bien para dudar del resto…
Sin darse cuenta, Lizzy le ha hecho responsable a Darcy por su silencio: Él lo conoce demasiado bien…
Y, además, le pone en un segundo aprieto:
… ¡Yo podría haberlo evitado! Ya sabía cómo era… Si se hubiese conocido su carácter, esto no habría pasado…
Cierto, pero Darcy le pidió secreto, y ella lo respetó. Doble responsabilidad a sus espaldas.
Y ya, pone la puntilla final….
… Cuando abrí mis ojos a su auténtico carácter… ¡Oh!, si hubiese sabido lo que tenía que haber hecho… Pero no fue así.. tenía miedo de revelar demasiado. ¡Qué error tan desastroso!
Tres en diana. Darcy se da cuenta de que, con su carta, Lizzy le creyó y además respetó su petición. El error de ella fue también el error, principalmente, de él. O al menos así debió de sentirlo. Darcy se sume en un profundo silencio, en el abismo de sus pensamientos que ella interpreta de la siguiente manera:
…. Elizabeth pronto se dio cuenta, y lo comprendió al instante. Su poder sobre él se estaba hundiendo; todo estaba naufragando ante esta prueba de la debilidad de su familia…
Precisamente ahora que sus sentimientos hacia él estaban cambiando … Jane Austen nos regala con esta preciosísima frase en el pensamiento de Lizzy:
… nunca antes había sentido tan sinceramente que habría sido capaz de amarlo, como en este momento, cuando todo lo que significara amor era ya en vano…
Y Darcy, tan expresivo como ya sabemos que es el muchacho, ante las lágrimas de Lizzy sale con un incomprensible (aunque más adelante se entenderá) requiebro:
(Darcy) Mucho me temo que haya Vd. deseado mi ausencia desde hace un tiempo…
¿Se sentía culpable?¿Qué pasaba por su cabeza? La despedida es, desde luego, para nota:
(Darcy) No la atormentaré con vanos deseos, que puedan parecer a propósito para solicitar su agradecimiento.
(Lizzy) Vió con lástima cómo se marchaba
«Quizás hasta nunca, Sr. Darcy…»
Capítulo 47
Cuántos Wickhams hay por la vida…
… Wickham nunca se casará con una mujer que no tenga dinero. No puede permitírselo.
Lizzy ahora es muy crítica con su padre. Lydia no tiene hombre que la proteja, ni siquiera su propio padre:
… Wickham pudo imaginarse a partir de la conducta de mi padre, de su indolencia y de la escasa atención que parecía prestar a lo que estaba ocurriendo en su propia familia, que haría y pensaría lo mínimo que se podria de esperar de un padre en esta situación.
Si, la verdad es que el Sr. Bennet, entretenido con las tonterías de su mujer y de sus hijas, no supo prever las consecuencias del desdén con el que las trataba…
Por cierto, me encanta Austen con sus sabio análisis sobre la conducta humana y la mente: a pensar también se enseña:
…. Nunca se la enseñó a pensar en asuntos más importantes…
Ahora, por fin, me gusta esta Lizzy. Ésta es su opinión sobre Wickham:
… carece de honor e integridad; todo lo que tiene encantador también lo tiene falso y manipulador.
¡Bravo Lizzy!
Cuando llegaron a Longbourn, Jane les puso al tanto de cómo estaban las cosas. Es decir, sin noticias. Y subieron a ver a la Sra. Bennet. La siguiente apreciación de Austen sobre lo que es responsabilidad de cada uno es, una vez más, magistral:
… la Sra. Bennet… estaba culpando a todo el mundo excepto a la persona a la que debían de achacársele principalmente los errores de su hija debido a su desacertada indulgencia.
El resto del capítulo se dedica a descubrir la carta de Lydia en la que decía que se escapaba, y a preparar todo lo que estuviera en las manos de la familia para recuperar la normalidad perdida…
¿Y Darcy mientras tanto? Ayshhh, ¡cuánto Hombre hay debajo de esa chistera!…. (nota de la autora del blog)
Y ahora… ¡A VOTAR!
Punto 1. Ley de Murphy? No, la maravillosa imaginaciòn de Austen! Hay algo màs conmovedor que el llanto de Lizzy y la protecciòn de Darcy? Y tenìa Lydia que dar semejante paso, para que el señor de Pemberley pisara el barro de los suburbios, se mezclara con la gentuza y entrara a burdeles, èl, justamente, sin importarle nada, sòlo por amor. Toda una lecciòn! Dicen que en cada pareja uno ama màs que el otro. Hace falta leer mucho para darse cuenta quien es el que màs ama y sabe amar aquì? Saludos
Por eso nos tiene a todas locas…. porque para hacer eso, como digo al final, tiene que haber mucho Hombre debajo de la chistera… 😉
sì, leo todo y me encantan tus comentarios para cada pàrrafo. Hoy es el Dìa del Amigo, y de alguna manera este sitio nos une aunque no nos veamos las caras, por eso te envìo un càlido saludo y que hayas tenido un buen dìa.
😉 Muchas gracias!!! Igualmente!!! 🙂
Perdón por meter la cuchara, pero las preguntas que planteas son demasiada tentación para no intentar responder.
¿Por qué creéis que Wickham eligió a Lydia? ¿Para vengarse de Lizzy, que había descubierto su personalidad?¿Por puro divertimento, pues no tenía la más mínima intención de casarse finalmente con Lydia?¿Habría tenido noticias del interés de Darcy por Lizzy y de esta manera fastidiaba el plan?
No creo que Wickham haya tenido conocimiento alguno del interés de Darcy, tampoco lo veo como venganza contra Lizzy. Ninguna teoría de la conspiración. Es una de esas simples casualidades, es más ni siquiera imagino que Wickham haya escogido a Lydia, seguramente sí coqueteó con ella, pero la oferta no dudo que haya venido de Lydia y el comodino simplemente no quiso la oportunidad de tener compañía fácil, sin imaginar lo que se podía ir encima.
Respecto a otra especulació:
El Sr. Darcy, que había acudido a Lambton a visitarla, presumiblemente para hacer un segundo intento de proposición (iba muy elegante, y ya sabemos lo que eso significa).
Justo una pregunta o comentario similar lo plantee en JAcastellano en la semana en que nos correspondió leer estos capítulos, pues medio mundo piensa que Darcy había acudido dispuesto a declararse por segunda vez, de hecho hay algunas fan fiction que juegan con la posibilidad de que así fuera (que pasaría si…), pero reflexionemos bien. ¿Iba muy elegante o es la escena de P&P2 la que nos hace pensar eso? Andrew Davies, el guionista, es de los que cree que eso iba a ocurrir y por eso inventó la escena que tenemos, de Darcy preparándose para ir a Lambton. Pero Nuria, con la lectura, me ha convencido de que una segunda proposición tan pronto no habría sido algo realista. Si bien el mismo Darcy más adelante declara que no tardó ni media hora de volver a ver a Lizzy para que renacieran sus anhelos, después de la escaldada previa habría sido demasiado pronto para una segunda declaración, lo que sí no tengo la menor duda que iba en plan de cortejo, pero hasta ahí, es decir, seguir congraciándose con Lizzy, hacerse agradable, conquistarla con sus atenciones, pero no arriesgarse a un rechazo nuevamente tan pronto.
Me divierte siempre imaginar es todo el chisme que seguramente estaba corriendo tanto en Pemberley como en Lambton respecto a ellos. ¿Cuántas veces el patrón acompañaba a unos turistas en un recorrido por el parque? El jardinero principal debió haberlo notado. Y no se diga en Lambton, ¿a cuántas personas habrá visitado Darcy en la posada anteriormente (además acompañado por su hermana en la primera)? Y no una, sino dos ocasiones en apenas tres días. Seguro el asunto estaba siendo el tema de conversación. Lo dicho, estaba mostrando a leguas su interés, pero no creo que como para declararse nuevamente a esas alturas del partido.
En cuanto a las cartas de Jane, también me parece parte de su caracterización, nadie excepto ella era incapaz de pensar mal de alguien, incluso es parte de su mecanismo de defensa, activado en ese estado de shock, por más que la evidencia le debería de indicar lo contrario. Casi un estado de negación, pero seguro, como psicóloga, sabrás más si existe ese tipo de reacciones, Mila :).
¡Qué bien, Cin! Me encanta tu comentario…
Respecto a Wickham, es cierto que la propia Lizzy culpa a su padre de negligencia en la atención a sus hijas. Algo que Wickham podría haber detectado y, como bien dices, si sólo hubiese dependido del Sr. Bennet, habría sido un mero divertimento… Pero también hay que entender la mente de los manipuladores como Wickham y la peor afrenta que se les puede hacer es descubrirlos, o que sepan que sabes la verdad…. No perdonan y son muy sutilmente vengativos…. Escapandose con la hermana sabía que el honor de las mayores estaría ya arruinado…. Algo que, aunque pueda parecer mentira, les produce gran regocijo…. A quien le interese el tema, le doy una bibliografía completita…
Respecto a Darcy, precisamente lo que comentas del chismorreo es lo que hace pensar que volvería a proponerle algo serio…. Un caballero de la talla de Darcy jamás permitiría que el nombre de la mujer de la que esta enamorado estuviera en boca de todos sin proteger su honor con una propuesta sería… Habría sido un gesto feísimo del que veo incapaz a Darcy, tan cuidadoso con estos asuntos, y especialmente con las personas a las que realmente quiere…
Por otro lado, lo hace abiertamente en su entorno y, en este caso, se está exponiendo a sí mismo. Darcy no permitiría este tipo de chismorreo hacia su persona por parte del pueblo que seguramente esta directa o indirectamente implicado en Pemberley, si sus intenciones no fueran absolutamente serias…. Y cuasi inmediatas…
Darcy estaba calibrando el efecto de su carta en Lizzy, y estaba comprobando que la perspectiva de ella hacia el había cambiado… Demasiado interés también en que ella y su hermana congeniasen bien….
Por otro lado, la última vez que Darcy estuvo a solas con Lizzy, se llevó un buen repaso. Intentar estar otra vez a solas con ella sin estar seguro de para que, sería extremadamente imprudente por su parte. Sin embargo, saca pecho y va sin nadie más…. Para mi es demasiado significativo….
Doy como margen que, de no haberlo hecho ahora, se la habría declarado tras la cena frustrada en Pemberley…. Pero Lizzy volvería a casa de ese viaje como futura señora de……
De no ser así, Darcy no sería Darcy…..
Por cierto, se me olvidaba añadir que mi referencia, en cuanto a series, es siempre OP 80, que es la que me parece más rigurosa con la novela….
Wow, respecto a lo que dices respecto a Wickham, me has convencido respecto a que una posibilidad en efecto haya sido vengarse de las alusiones que le hizo Lizzy.
En cuanto al rumor circulando en Pemberley y Lambton, pues, al igual que tú, estoy convencida de que, de no haber sido por la fuga, Lizzy habría regresado a Hertfordshire como la futura señora de Pemberley. Las intenciones de Darcy estaban siendo muy manifiestas y obvias, dejar las lenguas sueltas por un par de días más, en lo que él se aseguraba de los sentimientos de ella, no creo que fuera tan perjudicial, porque después de todo, las intenciones de Darcy eran incuestionablemente honorables y sus acciones nunca habrían pasado un límite que sugirieran otra cosa, en cambio el riesgo de que lo volvieran a mandar a freir calabazas o espárragos era más serio, además imagina, después de que todos lo vieran prodigando atenciones y que se quedara con un palmo de narices al final, la reputación de Lizzy no sufría nada, la de él sí (además del golpe afectivo). No por nada Henry TIlney le dice a Catherine que la mujer es la que tiene el poder o la capacidad de rechazar.
Pero insisto, una declaración ese día en ese momento, no lo creo, para un par de días después, por supuesto que sí.
De lo sucedido, vemos que se necesito algo tan drástico como para que Lizzy pusiera sus sentimientos en claro de golpe y porrazo. En otra situación habría pasado otro par de noches en vela tratando de descifrarlos para para saber que responder al momento de esa hipotética segunda declaración en Derbyshire.
A este paso, creo que estamos ya inventando nuestra propia fanfic, ja, ja, ja, ja.
Bueno, creo que lo hacemos dentro de los márgenes de la rigurosidad…. y, ¡porras»¡¿acaso no vamos a poder? 🙂 Yo creo que la visita a Lambton era para confirmar ya sí o sí, si en breve se lanzaba, porque la cosa iba francamente bien. Darcy ya conocía a Lizzy lo suficiente como para saber que si su presencia le desagradaba, se lo habría hecho saber. Y Lizzy estaba toda hecha mieles… pobrecita, darse cuenta de un error de percepción tan flagrante es una auténtica humillación… ¡y más si encima todavía sigue enamorado de ti! Por eso está tan confundida… Como bien dices, ¿cómo podría responder en esta ocasión? La verdad es que los dos, cada uno a su manera, se vieron muy humillados y de ahí que la declaración del final, sin pretensiones, con tanto respeto y consideración, y con tanto tacto, nos parezca una auténtica delicia… Iba a decir que «a mí por lo menos me lo parece», pero creo que es una opinión generalizada… Bueno, que me emociono… 🙂
Olvidé añadir, que espero que P&P1 no sea tu referencia para estos capítulos, porque temo que es donde más la riegan (coloquialismo para decir que meten la pata). Si un defecto le veo a esa miniserie es que en ella tenemos a una Lizzy que al recibir la noticia va corriendo a Pemberley. No sé en qué estaba pensando Fay Weldon, la guionista, cuando inventó una escena así, dado que sabemos que, de haber sido posible, Lizzy no hubiera querido que Darcy se enterase de lo ocurrido (la ironía está en que el hecho de que él se enterase fue lo que permitió que hubiera una solución). Una cosa es que él se enteró porque él llegó a Lambton y otra que voluntariamente Lizzy hubiera ido corriendo a Pemberley y así él se enterara. Totalmente fuera de carácter.
Sí, siempre me llamó la atención, y lo interpreté como que iba buscando a sus tíos, no tanto a Darcy o a Pemberley… Además, no tiene sentido que Darcy, en su propia casa, diga que «debe de hacer ya largo rato que esté deseando que me vaya»… pero bueno, entre esta invención, y la de Firth saliendo del lago, me quedo con la primera… es que es mi PP favorita, ya lo habrás notado… 🙂
Y en esa escena, además, hay un pequeño gazapo de Lizzy. Está llorando y Garvie debió de pensar que quedaba fuera de cámara, y se pone a jugar con el pañuelo… Como aquellas series eran más estilo «teatro» que estilo «cine», tiene su pequeña justificación técnica… Bueno, yo hago como que no lo veo…
Un análisis muy bueno, pero, en cuanto a las conjeturas de una segunda declaración, estoy con Cinthia. En el libro no dicen cómo iba vestido Darcy durante esta visita, no? En las miniseries sí va elegante, pero no debemos dejar que eso nos influya al juzgar la situación.
Darcy mismo le dice a Lizzie, más tarde, ya de comprometidos, que al volver a Longbourn, «El auténtico propósito era verte y juzgar, dentro de lo posible, si podría albergar esperanzas de poder hacer que algún día me amaras…» y que fue la intervención de su tía la que le armó de valor para volver a proponérsele. Entonces, ¿cómo arriesgarse a una segunda petición de mano a un par de días de volver a ver a Elisabeth? Su interés estaba a la luz del día, pero tenía que ir con pies de plomo si no quería un segundo fracaso.
Además, ar ir a verla a Lambton, no podía estar seguro de encontrarla sola, pues normalmente ella estaba con sus tíos. Una visita de cortejo, eso sí, pero no para declararse.
Lo que yo tampoco descarto del todo, es una segunda declaración después de la (fallida) cena de Pemberley.